"Sólo hasta hace poco pude comprender cómo llegamos a sentir tanta angustia.
Con Óscar solíamos estar bien cuando nos conocimos. Les contaré nuestra historia para que entiendan.
Hace cuatro años nos vimos por primera vez, estábamos en la Universidad. No me gustó al principio pero yo sí a él, era atractivo, pero no muy de mi gusto. Por lo general evitaba ese tipo de relaciones.
Primero comenzó acercándose como amigo, la relación se dio de forma normal, yo diría casi de forma perfecta, luego se declaró y las cosas cambiaron. Debo decir que eso fue mi culpa, no tendría que haber sido de esa forma, después de todo con el tiempo sentí atracción por él.
Al alejarme lo dejé solo, de igual forma él se alejó del resto, pero por causa mía, no quería incomodarme frente al resto de nuestros compañeros y amigos. Pasó el tiempo y casi no supe de él, a veces lo veía pero evitaba su mirada y lo rehuía sin preocuparme por el daño que le provocaba.
Cierto día en los pastos de la Universidad mientras compartía con mis compañeros lo vi caminando, en realidad zigzageaba de lo borracho que estaba. No pude evitar acercarme a él y acompañarlo, al principio no me reconoció pero pasado un momento supo que era yo y comenzó una berborrea de ideas como nunca había oído en mi vida, era imposible no notar la desesperación en que se encontraba. Abandonamos la Universidad y lo llevé a mi apartamento, después de su confesión se mantuvo en silencio incluso cuando habíamos llegado. Parecía un zombi. Lo acosté en mi cama y se durmió.
Pasé una noche intranquila, cada ciertos lapsos de tiempo él comenzaba a gritar, por lo que fue una vigilia constante. Pensando en lo que me había dicho en la tarde anterior finalmente después de pasadas unas horas me dormí.
Cuando desperté él me miraba, en su rostro se notaba una mezcla entre tristeza y felicidad. Preparamos el desayuno y él se tomó un par de pastillas, al consultarle el por qué de estas su mirada se tornó sombría. Cabizbajo me contó sobre las crisis que le habían comenzado a afectar cuando nos separamos. Me contó sobre lo que había sido su vida hasta ese momento, dándome cuenta del daño que le había provocado.
Decir que nos quebramos en llanto es poco, lloramos durante minutos, quizás horas, desahogándonos de toda la pena y la rabia que guardábamos. Al estar más tranquilos luego de nuestro desahogo nos miramos y no pudimos evitar lo que hicimos. Nos besamos e hicimos el amor, si habíamos llorado por horas fueron pocas en comparación al tiempo que nos amamos. Sentí cosas que nunca había sentido, su piel junto a la mía fue algo subliminal, cada vez que recuerdo esa primera vez no puedo evitar sonrojarme, sonreír y desear estar junto a él.
Desde aquel día volvimos a estar juntos, compartimos nuestro tiempo en la Universidad y todos supieron sobre nuestra relación. Nuestros amigos nos apoyaron y después de todo el daño hecho, el tiempo alejados, la angustia vivida por ambos, simplemente llegamos a un momento de nuestras vidas lleno de felicidad.
Esa es mi historia, como dije al principio no sabía cómo llegamos a tal nivel de dolor y angustia, fueron muchos los errores sobre todo los míos, pero lo más importante es haber salido de ellos y que se pudieron reparar."
Palabras aportadas por Alexis Silva, compañero de Universidad. Gracias por el aporte y las ganas de participar.
Recuerde enviar sus cinco (5) palabras a edov.tales@gmail.com
Entrada más reciente Entrada antigua Inicio
puta wn....me kagaste, no tengo palabras.....se asemeja demasiado a lo que paso, la diferencia es ue tiene un final y es feliz...y todavia no tengo mi final...pero bueno...alla vamos!
c-ya bro!
klownbored dijo...
12 de abril de 2009, 20:03
Ta nice, en la semana quizás te mando mis 5! ;)
vbenja dijo...
12 de abril de 2009, 23:06